Pulsera volcánica, cuarzo rosa y cuarzo blanco

Las piedras y rocas volcánicas atraen vibraciones positivas y son capaces de brindarnos estabilidad emocional ya que nos permiten eliminar las emociones extremas. Nos transmiten serenidad y paciencia para afrontar situaciones imprevistas o de estrés.

El cuarzo rosa representa la armonía, la tranquilidad y el amor. En el plano espiritual, el cuarzo rosa conecta con la paz interior y favorece la realización personal, aumentando la confianza y la autoestima hacia uno mismo. Esta piedra permite liberar emociones reprimidas en el corazón.

Los cuarzos blancos protegen de las energías negativas y malas vibras, alejándolas de las personas. Asimismo, estos cristales brindan serenidad, paz y calma, por lo que proporcionan seguridad emocional y mejoran la actitud en general.