Hay momentos del año en los que el mundo se vuelve más silencioso por dentro.
Las noches parecen más largas, los sueños más intensos, la piel más sensible.
A eso, nuestras ancestras lo llamaban el velo.
El velo no desaparece, pero se vuelve fino, como una cortina ligera que deja ver la luz del otro lado.
Y cuando se afina, la memoria del alma despierta.
No lo buscamos.
No lo invocamos.
Simplemente se siente.
🕯 ¿Qué presencias se acercan en estos días?
Principalmente:
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Ancestros
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Familias espirituales
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Guías de linaje
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Almas que nos acompañan desde antes de nacer
Su presencia no invade ni asusta.
Llega suave:
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en un sueño que te abraza,
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en un olor que regresa,
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en un pensamiento que acaricia,
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en una sensación de compañía dulce.
Eso es amor ancestral respirando cerca.
🌫 Y también se sienten los Egúns
Los Egúns son espíritus humanos en tránsito.
Almas que no han terminado su camino hacia planos más elevados.
No son malos, ni oscuros, ni demoníacos.
Solo están buscando dirección, calor o reposo.
Y cuando el velo es fino, la cercanía entre planos facilita ese contacto.
🌬 ¿Quiénes los perciben con más facilidad?
No porque sean “más espirituales”, ni porque estén “abiertos”, ni porque tengan “un problema”.
Sino porque su energía es sensible por naturaleza.
Entre estas personas están:
• Hijos de Yansã
Señora de los vientos, los movimientos y el tránsito entre mundos.
Sus hijos suelen ser puente natural entre planos.
No lo eligen — así nacen.
• Hijos de Obaluayê / Omolú
Sostienen en su aura la fuerza de la sanación profunda.
Los Egúns se acercan buscando descanso y alivio.
• Hijos de Nanã Burukê
Guardan la calma del barro primordial.
Son espacios donde las almas pueden recomponerse.
• Personas con mediumnidad o intuición natural
Aunque no practiquen magia.
Aunque no sepan ponerle nombre.
• Personas con corazón emocional muy abierto
Que sienten profundamente, escuchan sin esfuerzo, contienen sin darse cuenta.
• Quienes trabajan con lo espiritual
Tarot, limpiezas, guía emocional, acompañamiento energético — todo eso es puente.
No es privilegio.
No es carga.
No es casualidad.
Es naturaleza del alma.
🔥 Entonces, ¿cómo encender velas en estas fechas?
Una vela no llama espíritus por sí sola.
Pero sí es una señal de luz en el cruce de planos.
Por eso lo importante es la intención:
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Nombrar a quién va dirigida la luz
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Agradecer
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Cerrar el espacio cuando termines
Porque la luz protege cuando tiene dirección.
🕯 Ritual Simple de Honra y Protección
Material:
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1 vela blanca
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1 vaso o cuenco de agua
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Tu respiración
Pasos:
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Coloca la vela y el agua juntas.
La vela representa la luz.
El agua representa el tránsito y la calma. -
Enciende la vela diciendo en voz baja:
“Que esta luz sea puente solo para lo que viene en amor.”
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Pon una mano sobre tu pecho. Respira hondo 7 veces.
Siente tu cuerpo.
Siente este lado del velo. -
Di:
“Honro a mis ancestros.
Acompaño lo que es mío.
Devuelvo con respeto lo que no lo es.” -
Deja la vela arder.
Cuando termine, tira el agua lejos de la casa (desagüe, tierra, patio).
Este cierre es lo que sella el espacio.
Nada queda abierto.
🌙 Cierre
Estas fechas no son para temerlas.
Son para recordar y sentir.
No todos lo vivirán igual.
No todos tienen por qué hacerlo.
Pero quien sienta el corazón moverse un poco más este año…
que sepa que no está solo.
Que lo que se acerca en amor, viene a acompañar.
Y que todo tiene su lugar, su tiempo y su regreso.
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Que el amor reine,este y reemplace lo malo.